PRÓLOGO de Juan Cacho o un Cacho de Juan

Un día comencé a leer un libro cuyo título me llamó bastante la atención, esté era Juan Cacho o un Cacho de Juan. Me pregunte: ¿Qué encontrare en este libro?

Cuando descubrí a este personaje, vi que muchas personas podrían reconocer en él a alguien cercano, un amigo con el que podía contar tanto para los buenos como para los malos momentos.

Con un lenguaje sencillo, cotidiano, familiar... Juan Cacho, típico treintañero que le gusta ser independiente, vivir solo, prácticamente buscarse la vida por sí mismo, excepto en ciertas ocasiones en las que necesita un poquito de calor familiar... nos relata en este libro una etapa de su vida muy peculiar, comenzará contándonos unos meses de verano de su vida, llenos de líos, amores, engaños, tristeza, alegría... hasta acabar convirtiéndose en una novela de intriga, cuyo lector terminará "enganchado" a ella pasando un estupendo momento.

El tener entre nuestras manos un libro como Juan Cacho, tan fácil de leer, con esa mezcla de intriga y humor, divertido, entretenido, que no puedes dejar de leer... hace que pasemos un buen rato y nos ayuda a olvidar ciertas cosas que nos agobian día a día, incluso puede hacerte replantear la lectura como un habito cotidiano, dándole prioridad con respecto a otras cosas.